A tan sólo dos días de su debate en el Senado, crece la polémica sobre el proyecto de ley que autoriza el matrimonio homosexual se agudiza, donde las opiniones se dividen en medio de una abierta ofensiva de la Iglesia Católica para evitar su aprobación, argumentando viejos y obsoletos argumentos, de la época de la inquisición.
El proyecto ya obtuvo media sanción en la Cámara Baja y, de aprobarse el miércoles, Argentina será el primer país en América Latina que permitiese por ley el matrimonio homosexual.
En las misas de ayer, por orden del arzobispado se leyó el mensaje, del cardenal Jorge Bergoglio, en el que llama a los fieles a pronunciarse contra la iniciativa y los convoca a protestar mañana ante el Congreso, en la víspera del debate.
Dentro de los ejes del documento sostiene que los niños tienen el “derecho inalienable” de nacer y crecer en lo que definieron como “ambiente natural del matrimonio” heterosexual. “No seamos ingenuos: no se trata de una simple lucha política; es la pretensión destructiva al plan de Dios. No se trata de un mero proyecto legislativo, éste es sólo el instrumento; se trata de una ‘movida’ del padre de la mentira que pretende confundir y engañar a los hijos de Dios”, apuntó Bergoglio.
Desconociendo que dicha ley en ningún momento trata la ley de adopción, la cual ya fue aprobada hace casi veinte años atrás. No cabe duda que el transfondo de la discusión es de carácter político, donde cualquier cosa que quiera transformar el gobierno, estos sectores conservadores lo ven como un atentado a “la moral y las buenas costumbres”, desconociendo que dentro de la esfera política la moral no existe.
Clientelismo Religioso:
Como si a esto le faltara algo, los estudiantes de la Universidad de Católica de La Plata , pondrán a disposición micros gratis, garantizando el presentismo, para la movilización en apoyo a “La Familia Argentina ”, mientras que los colegios religiosos de capital la curia porteña promete bajar las cuotas escolares, lo único que falta será que prometan “ostia y vino” gratis para los concurrentes.-
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