A través de la religión se conoció la actitud de lo que conocemos como prebendismo. Dado que es una actitud de forma piadosa que se utiliza para otorgar algún beneficio.
Escuchar criticar el prebendismo como una mala acción es entrar en una contradicción mas, aun cuando son los sectores de la Clase Tilinga, chupa Siria de la ciudad Porteña, los generadores de este debate. Pero en fin, tomándolo de donde viene, no es importante desmenuzar esa contradicción ya que es una mas, de millones que a lo largo de la historia les toca descifrar, o en todo caso deberían encontrar “el consenso” con su moral y con sus costumbres para darse cuenta de que lado de la mecha se encuentran.
El tema central en todo caso, pasa por su debilidad “consumista” por esas buenas costumbres, aceptando su doble moralidad como sello característico de clase reconociendo al prebendismo del "establishment” que se lo venden como un gran sándwich de “Clarín con un poco de Radio 10” como aderezo, servido en una mesa paqueta adornada con rosas rosado rococó.
Esta maldita clase Tilinga, que todos los días digiere la prebenda del arreglo del bache, la nueva peatonal, o maldito discurso represivo, en nombre de la seguridad que nunca va a venir, por la misma inseguridad de gobernabilidad y falsas promesas que se nutre la derecha electoralista y mediática, prometiendo tener un “Plan” que nunca existió.
Son los que critican, con argumentos obsoletos y oxidados, cuando el Gobierno Nacional elige como política alternativa la Justicia Social, eso que la intellitzencia Pseudo –Parisina define como “el Choripan”, de ser así, esto pone una vez mas a la gran inteligencia popular, en primer palno la que prefiere comerse un “Chori” de parado y no una noticia pintoresca, chabacana, y sin sustento político.
Cabe entonces preguntarse a donde fue a parar la Educación Privada, los lujos y el confort de una sociedad Blanca, Culta, Europeizada, que acepta el Prebendismo de la fantasía Panglosiana en vez de asumir la realidad de construir una Patria para todos, donde la igualdad sea de oportunidades y no de propiedades.
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